Desnudo ante la cámara

No recuerdo haber pasado tantos nervios como esta mañana en el Laboratorio de entrenamiento actoral delante de la cámara de Pablo Silberschmidt y Virginia García-Salmones en el Teatro de Lloseta.  Jamás me había puesto delante de una cámara y mucho menos había hecho un cásting. 

¡Qué duro! El espacio me era extraño, la cámara, las directoras de cásting de Palma Pictures, quedarme casi inmóvil en un mismo punto, los focos me cegaban... Me he sentido más desnudo que nunca, solo, perdido... Tanto, que me he ido a comer pensando que esto no iba conmigo.

Ya por la tarde, me he sentido más cómodo con las propuestas de Virginia, sus juegos, la interpretación de las emociones... He disfrutado. Mucho. Lo único que me hacía recordar que había una cámara era que seguía sin poder moverme tanto como el teatro. 

Ha sido muy interesante explorar el trabajo del actor ante la cámara y ver cómo los directores de cásting pueden ayudar al actor y sí mismos, ponerse en el lugar del otro. Mañana más.